Listo para el rock!

Airbourne es una banda que uno al escucharla no puede dejar de remitirse a AC/DC. Si bien son dueños de un sonido que los caracteriza, también están muy emparentados con la leyenda.

Este 2013 los encuentra con su 3º disco de estudio (los anteriores 2007, 2010) con el animo y el "estilo" un poco renovados. Si mantienen la linea que los consagro de ser un rock que marcha hacia adelante como una locomotora, pero en esta ocasión no hay abusos de las clichés clásicos del estilo. Esta vez supieron darle una vuelta mas de rosca a los temas, evitando caer en la monotonía de ser tan rectos y directos incluyéndoles algunas secciones rítmicas y vocales mas variadas y dinámicas.

Es notable destacar por otro lado la particular voz de Joel O'Keeffe, que como en los anteriores discos es siempre la que se carga el tema al hombro y le da peso propio a Airbourne. Sin embargo el acierto que supieron tener en la placa aquí presente, se debe a la reducción de la voz aguda y las notas altas por parte del mismo. Tal vez en busca de una identidad vocal o solo por el echo de no saturar demasiado las canciones, pero cuando esa voz grave quebrada aparece (mas cercana a Lemmy que a Brian?) le da todo un nuevo color a la banda que es justo lo que venia necesitando para despegarse de las comparaciones fastidiosas.

Como tantas otras bandas Airbourne es una maquina incansable de hacer riff's, todos sus discos son poseedores de guitarras que quedan taladrando melodías en la cabeza del oyente. Son clásicos, potentes y porque no... modernos. Después de 3 años valió la pena el tiempo esperado. Solamente queda agitar la cabeza y disfrutar!

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