Excelente (me fascina). No soy blacker. Me interesé por el sonido tarde años 2000 poco menos, pese a que mi cumpa de radio me habla del black desde 1990. En los tiempos de la revista Madhouse (imaginen, sin internet) todo lo que rodeaba al black est impresa con toda esa boludez del ns, la quema de iglesias, la tribu urbana del satanismo, los asesinatos. Parecía un circo como el de los Guns An Roses, la música parecía ser lo secundario. El tema de las caras pintadas eso es algo aparte. Siempre he creído que el músico debe identificarse con su público al máximo, lo demás es postura, propuesta artística, imagen y espectáculo. Creo que realmente me comenzó a gustar el black cuando las grandes bandas dejaron de hacer black, cuando se relajó toda esa payasada que había detrás, o por lo menos lo que yo interpreto como payasada.
A mi entender, Immortal es una banda injustamente ridiculizada, Satyricon hace para saltar contentos, Ulver tiene solo tres discos que valen la pena y Darkthrone le dio una vuelta de tuerca al black volviendo a las raíces del black. Y nunca me cerró lo que hacen esas bandas que llenaron al black de tecladitos. Ya no hay que ser black de hueso colorado para decir que es un sonido de puta madre y comprarse los discos.
Creo que me gustan los sonidos, extremos y el black está entre ellos. No es solamente música, lo entiendo. Entiendo eso de que ser anti algo es solamente para apartarse de lo establecido y hacer algo por uno mismo. De vez en cuando me entero que X banda son ns y eso me hace vomitar, y realmente no lo puedo aceptar. Es como escuchar heavy metal justicialista o heavy metal pro Videla. Una pelotudez total.
Lo extremo es para mi pensar en extremos, preguntarse todos los días a qué límite llegarán las cosas. Hasta dónde llegará la depravación, el exterminio, la muerte, la necrofagia, lo más bajo y sucio del ser humano. Para mi lo extremo es un tipo que acuchilla a otro en la calle por cien pesos, no un pibe con cara pintada que busca una casa abandonada y se saca una forto en algún ritual.
Supongo que del black me gusta ese sonido tan pesado, las voces chillonas envolventes, la idea de que se alza la maldad sobre el mundo. No me interesa la escena ni los lineamisntos políticos ni quemar iglesias, toda obra humana tiende a la decadencia, y la iglesia no está excenta.
Pero esta sociedad, burguesa, conformista, de televisión pagada para ver puteríos entre vedetes, necesita de cachetazos de este tipo, de alguien que de alguna manera diga, que no, que las cosas no están bien. Y el black tiene parte en todo eso.
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